Parto en el agua-2014-

Parto en el agua-2014-

domingo, 18 de marzo de 2012

CAMINOS DEL ESPEJO,de A.Pizarnik,por Silvia Martínez Coronel.



Y sobre todo mirar con inocencia. Como si no pasara nada, lo cual es
cierto.
Pero a ti quiero mirarte hasta que tu rostro se aleje de mi miedo como
un pájaro del borde filoso de la noche.
Como una niña de tiza rosada en un muro muy viejo súbitamente
borrada por la lluvia.
Como cuando se abre una flor y revela el corazón que no tiene.
Todos los gestos de mi cuerpo y de mi voz para hacer de mí la
ofrenda, el ramo que abandona el viento en el umbral.
Cubre la memoria de tu cara con la máscara de la que serás y asusta a
la niña que fuiste.
La noche de los dos se dispersó con la niebla. Es la estación de los
alimentos fríos.
Y la sed, mi memoria es de la sed, yo abajo, en el fondo, en el pozo,
yo bebía, recuerdo.
Caer como un animal herido en el lugar que iba a ser de revelaciones.
Como quien no quiere la cosa. Ninguna cosa. Boca cosida. Párpados
cosidos. Me olvidé. Adentro el viento. Todo cerrado y el viento
adentro.
Al negro sol del silencio las palabras se doraban.
Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no
estoy sola. Hay alguien aquí que tiembla.
Aun si digo sol y luna y estrella me refiero a cosas que me suceden.
¿Y qué deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo.
La noche tiene la forma de un grito de lobo.
Delicia de perderse en la imagen presentida. Yo me levanté de mi
cadáver, yo fui en busca de quién soy. Peregrina de mí, he ido hacia la
que duerme en un país al viento.
Mi caída sin fin a mi caída sin fin en donde nadie me aguardó pues al
mirar quién me aguardaba no vi otra cosa que a mí misma.
Algo caía en el silencio. Mi última palabra fue yo pero me refería al
alba luminosa.
Flores amarillas constelan un círculo de tierra azul. El agua tiembla
llena de viento.
Deslumbramiento del día, pájaros amarillos en la mañana. Una mano
desata tinieblas, una mano arrastra la cabellera de una ahogada que no
cesa de pasar por el espejo. Volver a la memoria del cuerpo, he de
volver a mis huesos en duelo, he de comprender lo que dice mi voz.
 —

ESCALERAS, de Silvia Martínez Coronel, por Silvia Martínez Coronel




Mi daga come los aros de fuego de mi boca
vomito los sueños que no he tenido
pernocto en mí y no me despierto
debo salir
irme antes de que toquen las campanas
cuando era niña miraba la vida por dentro y las hojas de otoño rasgaban mi piel
ya tengo poco tiempo
tengo contados los latidos, y las caricias y los golpes
y todo lo tengo contado
me da fiebre tanta pobreza de santos
me muero en mí de sapos en mi vientre
quiero irme
suéltenme ya
que no puedo detener más el grito
y si grito he de desgarrar la noche
y si desgarro la noche se romperá la canción de cuna
con la que hacía dormir a mis muñecas rayito de sol
la mamadera mágica azul que se llevara el lobo en una bolsa plástica
bien,no era mágica pero yo lo creía
y cuando supe de su falta de prodigio ya era grande!
que alguien me devuelva mi infancia
que alguien me regrese intacta al punto de partida
antes del secuestro
antes de la mano dormida que me arrebatara de la cuna
ya
ya no son lágrimas lo que cae de mis ojos
es vidrio molido y ratas muertas
y silencio
este dolor tan viejo y tan nuevo
esta escalera que no es la escalera de mi casa
pero igual lleva abajo
en esta casa no hay sótano
pero en las noches se abre un hueco en el piso por donde caigo
me tomo de los cabellos
miro como pasan las cometas llevadas por el viento de la primavera
intento recordar cuál era mi nombre antes de que me pusieran éste
me derramo en cuchillos arrugados
tengo sed de mí
las muñecas de cartón las dejé todas vestidas
me puedo ir?


Silvia Martínez Coronel
Derechos reservados
 

PAEMA



El poema es una jaula de palabras
oportunidad del nombre
dejar de ser pájaro
lombriz burlaría barrotes
molécula
casi estaría libre
y el poema sería
la palabra


silvia martínez coronel
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MI PADRE



flor de olivo centro de niño en invierno
luz latiente enjaulada
calva de silencio trueno
ruego en gritos envuelto
manos cuarteada trampa
para nuestros ojos tiernos
trepando siempre
montaña con viento en contra
mochila de piedra y cruz
motor a lo lejos
escalera cerrada puerta
ventana blindada
beso callado
regazo inmenso invisible
no haberlo sabido antes!
ay ceguera de látigos de fuego
que bajo el suelo, paredes, cucharas, pasos ardientes
mentiras, chillidos y miedo
brillaba tu carita sucia
padre niño, corazón huérfano.


Silvia Martínez Coronel
Derechos reservados.

TODAVÍA II



Cópula de miradas, unión con el espejo
mi gemido que es tu gemido inalcanzable
tanto poder
saberse tanto embriagado en el propio ser
y el otro que no es un otro sino un yo multiplicado
imán de tu boca, placer que me toca
sed
mar inagotable
en tal punto penetrable
sin fondo
pleno en misterios
dulce virtud
prodigarse en adverbios
sentirse fuera
parirse dentro
y es la sangre humedad tanta
rocío sin pereza de derramarse en vida
de continuarse en otro
sin final
siempre en todavía.

silvia martínez coronel
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EL GRITO





Tengo la certeza de que no me he muerto

cabalgué sobre lunas oscuras, incompletas, sin verbo

pero me nacieron palabras y universos enteros

tuve cuchillo por moña y túnica de silencios huérfanos

pero aún la tiza expande mis letras por pizarrones y cuadernos

la caricia cantó su tango de arrabal sin dueño

y encontré el frasco sin una gota de medicina contra conjuros siniestros

callé mi grito y ensordecí al duende que afanoso construía dentro

golpeó mi sangre, pateó mis huesos, rompió flores en mi huerto

y no dije nada, sólo hamaqué  palabras sin sentido

e inflé globos con helio



Una noche helada

me tendí en mi ataúd, convencida de que había muerto

los enanos no pudieron salvarme

eran demasiado pequeños

no pensé en príncipes, ni en sapos, me fundí con el inaudible reflejo

dormí mi sueño de mil años

hasta que me despertó el grito de mi duende, ya casi tieso

le entregué mi oxidada égida, mi agua y le devolví mis sueños

y fue cuando me dijo al oído:

tengo la certeza, de que no te has muerto.



Silvia martínez coronel
Derechos reservados.

TRUEQUE




(“si soñar no cuesta nada/qué caros los resultados” Circe Maia)


Dar pétalo a cambio de espina 
es abrir ventanas
brazos que se llenan de palomas
limpiar la casa


incendio de gracia azul
que me hace parir sonrisas enloquecidas


crezco en el espacio
pero
nada me traspasa
mis alas son trompos que giran sin detenerse
en el tio-vivo de mi esperanza


nombro mi nombre
entro en el aire
miro los círculos que penetro
y se desprenden desde mis dedos polvo de estrellas dormidas


aún


el dolor se pasea por mis rincones
sé que es el precio de los sueños
que me he negado


devoro la nostalgia de mi misma
y emprendo el viaje



silvia martínez coronel
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MI HUECO




que vuelve noche el día
reclama algo...

me vuelvo gris al verle y me siento
cada vez más pequeña
Le echo sueños, recuerdos…
canciones no inventadas aún
poemas sin letra
hasta que me llega el sueño y me duermo 
llorando de pena 
tengo un hueco profundo que no se sacia y no
boa hambrienta que pide y pide
pero nada la llena,
tiene mi futuro,mi presente, mi alma entera!
pero aún así, me mira y mira, y su mano alarga
y siento entonces que los minutos no pasan
y que lejos de ser corta
la vida es demasiado larga.


silvia martínez coronel
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COSA DE PÁRPADOS


Es hora en que sueño camina por mis ojos
celebro insistencia acorralada
me desuno de torpe ventana hacia la nada
debo cobijar muertes
coserme esperanza
cree manda alguna cosa?
no es más que cosquilla entre sábanas
y lejos
no ellas en mí
tome su asiento
regaré plantas
haré
ensalada con pétalos de jazmín
oleré noche
recordaré olvidos
abrirle el techo a las palabras
acostarme sobre aire
cerrar piso a los fantasmas
jugar guerra en alfabeto griego
tejer sin prisa adioses abrigados.


silvia martínez coronel
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. 

SED



Cuándo sombras alejarse
casa de los no sueños
sólo verdes hojas, urgente primavera
beso en frente, en boca, mano sobre hombro
nostalgia y no tristeza
cuándo silencio será escuchado sin muda mortaja
sino espacio para sernos simplemente
dentro y fuera
abiertas las puertas al ocaso
brisa fresca en el campo
ojos cerrados
mermelada de mora en pan casero
aroma adentro reparando grietas del asfalto
cabalgata a pelo saliendo el rojo entre las nubes
mar entre los pájaros
caminar despacio descalzo
sobre el rocío calmando la sed de ser, de estarnos
oliendo la belleza, saboreándola, tocándola, escuchándola
en el centro del pecho galopando.


silvia martínez coronel
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 —

RECUERDO


Late tu tibieza en mi ombligo 
tu calor crece y multiplica
las imágenes que te guardan en mis ojos
aquel beso desde la sonrisa

Espejos nacen en el aire cuando te nombro
que se mecen en el ángulo izquierdo del dibujo
y te presentas en aroma y en sonido
y toco la melodía de tus pasos
la seda naranja cristalina
el sabor que dejó en mi lengua tus caricias

El amor hierve en la cocina
nos prepara café
lava la vajilla
acomoda mi ropa en los cajones de mi alegría

Hay silencios que no tienen como irse
se recuestan en mi pelo
te buscan y te encuentran y se quedan
mirándote cómo brillas
en cada rincón de mi recuerdo
donde se quedó tu lágrima, aún tibia.


silvia martínez coronel
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EL NOMBRE


"Los artificios y el candor del hombre
no tienen fin. Sabemos que hubo un día
en que el pueblo de Dios buscaba el Nombre
en las vigilias de la judería." El Golem.J.L.Borges

EL NOMBRE

No rozo siquiera la curva
el pequeño orificio meta
No es posible entrar y concebir.
garabateo, gesticulo
loro amaestrado
alimento lejos
río lejos
los cocos no interesan
las mentiras saben del ovillo
el inicio del todo
la imagen inversa y la otra
desde el otro lado estando en éste
me arrastro hacia la boca
quiero gestarte y que me gestes
oasis
nada
sueño
silencio
palabra
portal indiferente
sácame los ojos
no tengo alma
en mi piel habitan los fantasmas.


Silvia martínez coronel
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SOMOS



Estar
Amar
Acompañar
Sentir
Vibrar
Ser cómplices
Haber pasado por tantas
y por ninguna
Tener
el sueño en las manos
el más osado
el que ni se atrevía a ser soñado
Me estás
Me amas
Me acompañas
Me haces vibrar
Eres mi cómplice
Has pasado por sobre todo
y todo ha sido nada
porque me tienes
porque sabes
que estoy
que te acompaño
que te siento
que percibo como vibras
que soy tu cómplice
que he superado todas
y ninguna
Porque nos tenemos
somos nuestro propio sueño
el más osado
el que jamás nos atrevimos
ni a soñarlo.

Silvia martínez coronel
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NADA


Nada, rayos de sombra que explotan en la sangre
Nada,lunas descolocadas sin luz, sedientas de hambre
Nada, aquel grito en la noche, aquel silencio en el día
Telarañas que colgaban de cada rincón de la agonía
Los pasos en la escalera sorda y sin escalones
Los hijos de nadie, de sí mismos madres
Dagas voladoras quebrando huesos
Constantemente el alma en el trapecio
tragar con lava lágrimas de vidrio molido
Aquel frio!

Nada
Mentiras!,
Pura literatura!

Cerremos los ojos al teatro de la vida

Nada. La mesa está servida
No hay vino, pero hay uvas.

Sólo están permitidas las comedias bufas.

Nada.


silvia martínez coronel
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OLVIDO


Ya está bien de tanto frío
revestiré mi casa de madera, y pondré silencios
ya está bien de lluvia de cuchillos
sacaré la alfombra de algodón
y que se claven sin ruido
ya está bien
no quiero saber de ataúdes ni de secos ríos
ni de vómitos de sangre
ni de caudillos
me basto sola para comer mi almuerzo
puedes llevarte tus colmillos
o hincarlos en la entrada
o usarlos para perforar hastíos…
y si aún quieres quedarte
por quién sabe qué motivo
hazme un favor
enciéndeme la estufa
que ya está bien de tanto frío.


silvia martínez coronel
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DENTRO



Pasea mi nostalgia dentro y fuera de cada cosa
pero
te siento, incluso de ojos abiertos,
mi piel ha guardado tus manos, mi olfato tus caricias de palabras
de mi cuarto no te has ido, aún peinas mi alegría
y
no cambio un solo minuto de tu ausencia por todas las presencias
si aún dibujas pentagramas que expanden luz y certezas

Mi sueño y mi realidad convergen en ti
la distancia me la guardo en el bolsillo y se la regalo a los que se atan a los espacios
yo estoy en ti,
no me reconozco en otro lugar que no sea ese
ni sé otra forma de estar más cerca
ni otro motivo para ser más feliz
sé que nos dan muchos nombres
pero a mí sólo me nombra el que labras sobre mi pecho
mientras los violines tocan solos
incendiados de gozo
frutos del prodigio
de sernos más acá y más allá
dentro.

Silvia Martínez Coronel
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AHOGO


Látigo de sombras
oscuridad incendio de adverbios
dolor en los andrajos
silencio de notas, desorden de gritos
cuelgan telarañas
inviernos imprevistos
veranos de frío
cielo gris
sol escondido
la araña se desliza, va vomitando muerte
todo lo que toca lo deshace
y ni hilo, ni aguja, ni pegamento
grietas
fisuras
se pierde agua
la flor cae
el viento la desparrama .


Silvia martínez coronel
Derechos reservados.
 

TU ALA



Esta noche te he extrañado de gaviotas que se van

me he sentido a medias, sin luz en los espejos
huérfana de ti, pecho vacío
manos vacías
alma desgajada en rotos sueños
sentí languidecer mi pobre ala
una sola ala no hace vuelo

mi amor lloró en cunas vacías
casas sin dueño
telarañas en las ventanas del silencio

Definitivamente
mente y cuerpo
no estoy donde no estás
no soy, no quiero
donde tus ojos no me miran
no me veo
todo me es transparentemente ajeno

Vine a buscarte de violetas en la sangre
a sentir tu olor en el recuerdo
prendido en las paredes de mi casa
y al sentirte
en el aire nuestro que respiras
se despertó mi ala
y cerré mis ojos para verte

Vine a tu nombre
a acurrucarme en los huecos de sus letras
todo es nada y menos aún
si no estás a mi lado la vida sabe a ataúdes sin nadie
en un velorio donde no vino el muerto
y las lloronas lloran su suerte
de velas para el viento

te pienso en mi mirada, te toco en tu voz
me busco en el centro de tus manos que me acercan
alejan de los cartones roídos por las ratas del desvelo
por qué jugamos al adiós?
si no hay fuerza humana que deshaga nuestro nudo


SILVIA MARTINEZ CORONEL
Derechos reservados

AGUA



Cuando nace el poema la semilla crece en tierra seca
regada por ríos de palabras
cuando canta, la oscuridad se quiebra
por su látigo dulce, golpe sin rabia
y nacemos con él
nos intercambiamos caricias de miradas
y surgen sonrisas en las caras de los muertos

se recrea el sonido y el aroma y el invento
tocamos sin miedo el primer sueño
y en la boca degustamos sabores innombrados

cuando nace el poema, nos atamos a los todavía
vienen al recuerdo los nombres olvidados
y nos rescatan ilusiones que creíamos perdidas

volvemos a ser niños con su abrazo
respiramos conforme a su latido

nos alimenta su savia de ventanas
puertas a puentes
escaleras al deseo

y al subir por nuestras nervaduras
nos cose su instrumento los agujeros de la sangre

nos devuelve enteros, rumbo, pájaro
y sin pensarlo
todo es cierto, sin dudas, ni temblores,
se cierran nuestros ojos,
palpamos la música
abrimos los puños apretados

cuando nace el poema
es parida la verdad y creemos y somos
por el minuto que dure su encanto necesario.


silvia martínez coronel
derechos reservados
 

INDIFERENCIA

Se desgarran ilusiones desde los techos
La lágrima que no quiso ser llorada
reclama sus derechos
A nadie le importa si la madrugada nace muerta
conque mañana no sea Lunes
todo es dado por bueno
Ante tan poca exigencia
languidece la poesía en los portales,
un mendigo la recoge y se eleva...

En algún lugar de esta desquiciada tierra
acaba de nacer un poeta.

silvia martínez coronel
derechos reservados